Por: Francisco Uribe Era un jueves como cualquier otro, el clima era agradable, sin embargo, se podía sentir una inquietante apatía en el ambiente. Laura decidió dejar lo que estaba haciendo y tomarse
Por: Francisco Uribe Era un jueves como cualquier otro, el clima era agradable, sin embargo, se podía sentir una inquietante apatía en el ambiente. Laura decidió dejar lo que estaba haciendo y tomarse